Sera que encontraron el turismo electoral de los pitipatriotas en el exilio economico de los EEUU?

por **Charlie319** Lun Oct 22, 2012 1:53 pm

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Más electores que gente
Discrepancias entre la cifra poblacional y los ciudadanos hábiles para votar según la CEE

Por Ricardo Cortés Chico / rcortes@elnuevodia.com

En al menos siete municipios de la Isla, la cantidad de electores activos supera la población hábil para votar. En otros 13 pueblos se registran altísimos porcentajes de electores inscritos de 18 años o más de cara a las próximas elecciones generales.

Por ejemplo, en Orocovis, de 17,064 electores hábiles para votar según el Negociado del Censo, están inscritas 17,972 personas.

Y en Villalba, los electores inscritos superan por 1,016 personas a la población de 18 años o más.

Estos descuadres, que se reflejan claramente entre los números de la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) y el Censo, añaden dudas al proceso electoral, especialmente, en lo que respecta a la depuración de las listas electorales, las transferencias de electores y a sospechas de intento de fraude en el proceso electoral.

“Eso no puede ser”, fue la primera reacción del comisionado electoral del Partido Nuevo Progresista (PNP), Edwin Mundo, cuando fue abordado sobre el tema.

“Uno tiene que presumir que hay algún tipo de irregularidad”, reaccionó Julio Fontanet, comisionado electoral del Movimiento Unión Soberanista (MUS). “Me es difícil entender que pase eso. No es lo normal”, expresó, por su parte, Virgilio Ramos, representante novoprogresista en la redistribución electoral.

¿Votan todos en Culebra?

Según el demógrafo Raúl Figueroa Rodríguez, el municipio de Culebra tal vez es el que mejor muestra los descuadres entre las listas de los inscritos en la CEE y los datos poblacionales del Censo.

En esta isla municipio, según la CEE, hay 1,770 personas activas para votar el 6 de noviembre. Esta cifra casi alcanza los 1,818 habitantes que tenía la isla según el Censo de 2010.

Además, la cifra es mayor a los 1,403 habitantes que en el 2010 tenían edad hábil para votar (18 años o más). Los estimados del demógrafo para la población del 2012 -usando como base los datos del Censo- arrojan números similares. A simple vista, estos descuadres podrían hasta sugerir que toda la población de Culebra, incluyendo enfermos mentales y menores de edad, están en la listas de inscritos, afirmó.

Una de las razones para estos descuadres saltó a la mente de José Rosario Meléndez, alcalde de Cataño, uno de los siete municipios con más personas inscritas que residentes hábiles para votar. En su campaña a la reelección, ha tratado de identificar a los electores inscritos que no viven en su pueblo.

Esto ante la posibilidad de que haya una migración de electores de pueblos vecinos, como Bayamón y Guaynabo -donde usualmente los novoprogresistas ganan por amplio margen-, y que así se desvíen sus votos a contiendas más cerradas como la suya.

De hecho, en cinco de los siete municipios con más inscritos que población hábil para votar, la contienda por la poltrona municipal en el 2008 se decidió por 600 votos o menos. Cataño se decidió por 402 sufragios.

La situación electoral en Villalba quizás sea la más ilustrativa de esto. Allí, el Partido Popular Democrático ganó la alcaldía por 37 votos.

El demógrafo estimó que en ese pueblo hay entre 956 y 1,016 electores de más, si se compara con la población del Censo de 2010 y con la que estimó para el municipio en el 2012.

Presuntas deficiencias en el Censo del 2010 y que muchas personas estén votando en precintos y pueblos donde no residen fueron otras posibles razones dadas por los entrevistados, para explicar el extraño descuadre en las cifras.

No obstante, casi todos los consultados coincidieron en que tales discrepancias son motivo de “alerta”.

“Esto no quiere decir que está ocurriendo un fraude en las elecciones. No hay evidencia de eso. Lo que sí debe ser es motivo de alerta y motivarnos a estar pendientes el día de las elecciones”, dijo el perito electoral y exalcalde de San Juan, Héctor Luis Acevedo, al dejar entrever que pudiera haber vaciado de listas.

Tanto Acevedo como el comisionado Mundo argumentaron que existen serios cuestionamientos sobre la precisión de los datos recopilados por el Censo.

Acevedo señaló que, durante el proceso de redistribución electoral, los representantes del Censo admitieron que los números dejaban habitantes fuera.

“Hubo un ‘undercounting’”, dijo Acevedo. Las implicaciones de esto son sencillas. En la medida que baja la población, el número se acercará a la cantidad de electores inscritos en los pueblos y reflejará números dudosos.

Transferencia de electores

Por otro lado, la hipótesis de que los electores no informaron cambios de residencia se puede apreciar un poco en los mismos datos del Censo.

Por ejemplo, Toa Alta y Gurabo figuran entre los municipios con mayor crecimiento poblacional para el 2010. Sin embargo, ese aumento no ha sido proporcional al alza en el número de electores inscritos en dichos municipios.

Es decir, muchos de los nuevos residentes de estos pueblos están votando en otros, explicó el demógrafo.

La consecuencia es simple, muchas alcaldías y escaños en la Legislatura, especialmente los que se deciden por márgenes estrechos, podrían ser decididos por personas que no viven allí.

“Muchas personas no entienden la necesidad de hacer la transferencia cuando se mudan o las diferencias que hay entre precintos y municipios desde el punto de vista electoral. Es un asunto de representatividad”, dijo Ileana Aponte, comisionada electoral del Partido del Pueblo Trabajador (PPT).

Ramos, el representante novoprogresista en la redistribución electoral, coincidió en que el problema parece estar en las transferencias. “Es curioso porque los partidos son muy celosos con esto”, comentó.

“Esto lo que demuestra es que no se depuraron bien las listas”, dijo, por su parte, el comisionado electoral del Partido Popular Democrático, Eder Ortiz.

El proceso de recusación de electores por su lugar de residencia terminó el 30 de abril, por lo que el día de las elecciones los funcionarios no podrán recusar el voto de los votantes por ese motivo.

Se desconoce el efecto que (tendrá) podría tener los 330,000 electores añadidos (que se podrían añadir) con la decisión del Circuito de Apelaciones de Boston. La propuesta del PPD era que si un elector acude a un colegio que no corresponde a su residencia, solo podrán emitir un sufragio en las papeletas para gobernador y el plebiscito.

“Esto no va a decidir las elecciones principales a nivel nacional porque todos estamos en el mismo País”, dijo Adrián Díaz, comisionado electoral del Partido Puertorriqueños por Puerto Rico (PPR).

Las discrepancias entre los inscritos y la población pudiera dar margen al vaciado de listas y a que se cometan fraudes electorales parecidos a los detectados durante las primarias del PNP en Guaynabo, según admitió Ortiz.

No obstante, el comisionado electoral del PPD señaló que se trata de un panorama poco probable, porque en las elecciones generales la defensa de los votos tiende a ser eficiente.

En las elecciones de 1936 ocurrió una situación similar a esta, con municipios con más inscritos que personas hábiles para votar. Entonces, eso fue síntoma de un fraude electoral masivo facilitado por la eliminación del requisito de entintar los dedos al elector que entra a un colegio de votación.

Según Acevedo, actualmente existen salvaguardas para evitar aquel fraude, como la propia tinta en los dedos, que evita que una persona vote dos veces, y la impresión de las fotos del elector en las listas de votantes que usan los funcionarios de colegio.